RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

lunes, 1 de junio de 2015

MARTES 26: LLEGA UN ENTRENO MÁS POSITIVO. ¡YA ERA HORA!

"Lo que se hace esperar normalmente no avisa cuando llama a nuestra puerta"

Dicen que hacer algo por rutina o por empecinamiento no es saludable. Que siempre hay que poner pasión en lo que uno hace. Pero sin estar en desacuerdo con dicha afirmación, creo honestamente que es imposible estar siempre apasionado y que la realidad nos trae días grises en los que hacemos simplemente "lo que tenemos que hacer" y quedamos a la espera de lleguen esos otros días maravillosos que nos hacen sentir tan bien. Llevaba demasiados días haciendo "lo que tenía que hacer", es decir, sintiéndome que estaba corriendo por obligación. Además, la situación de mi mujer y su lesión no me ayudaba nada a encontrar la motivación necesaria. Pero conforme ella comenzaba a incorporarse poco a poco al ritmo de entrenamientos nuevamente yo fui encontrando a su vez el camino. El martes tenía que meter intensidad y cambié el guión en el que había escrito "fartlek" por "cuestas". Volví a tomar el camino entre los Cerros de la Aguzadera y a su regreso me puse a subir el Cerro del Angel. Me estaba sintiéndome mejor que en días anteriores, más suelto y pese al calor estaba resultando un entreno "más redondo". Así que apreté los dientes y subí a buen ritmo por el carreterín. La bajada también fuerte para después volver a subir una segunda y última vez a un ritmo incluso más fuerte que la anterior. Cuando me ví nuevamente abajo sentí que había hecho las cosas bien, que podía regresar a casa con un entreno "bien hecho", y aún así el regreso también lo hice fuerte, con buen ritmo, saliéndome 13 kilómetros de calidad, muchas jornadas después.

Resultado de imagen de por fin

No hay comentarios :

Publicar un comentario