Ya había olvidado la sensación del gorro y el foquillo encima, pero pronto se vuelve a recordar. En estos días vienen a mi justamente visiones de entrenos de hace aproximadamente un año y ahora más si cabe, cuando ya comienzo otra vez a usar este aparato tan necesario para correr de noche. Me levanté a eso de las 06:35 con mucho pero que mucho sueño, me tomé un café y un par de galletas y me puse la ropa de faena. La idea era ir hasta el Hotel El Hidalgo por la correspondiente vía de servicio de la AIV y volver por la otra vía de servicio que hay justamente en el sentido a Andalucía. Algo dormidas las piernas al comienzo, pero luego fueron entrando en calor. A un ritmo que poco a poco llegó a 5´y que pasada la media hora de carrera bajé hasta aproximadamente 4´45´´. La vuelta tiene una cuesta prolongada y considerable y me sentí bien de piernas. Al final un poco más y disfruto. Curioso pero el foquillo sólo lo usé durante un par de minutos cuando se acercó algún coche de frente.
Cuando llegué a casa tocaba hacer unos ejercicios de gomas, y eso hice. Después estiré y a trabajar. Tiempo total 1 hora 4 minutos y 12,3 kilómetros.
En tres días seguidos llevo acumulados casi 53,5 kilómetros, lo cual está muy bien, sobre todo porque no me siento cargado.
Mañana viene lo peor, y ya estoy rezando; toca 4 series de 3000 en la pista. Eso sí, pretendo hacerlas bastante suavemente, sin pasarme esta vez.
RELATOS
Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.
lunes, 10 de septiembre de 2012
LUNES 10: ALGO MÁS DE UNA HORA CON FOQUILLO INCLUIDO
Publicado por
JAVIER AYUSO
en
19:52

Enviar por correo electrónico
Escribe un blog
Compartir en X
Compartir con Facebook
Compartir en Pinterest
Etiquetas:
ENTRENAMIENTOS
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario