RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

domingo, 12 de junio de 2016

VIERNES 10: FABULOSO ENTRENO QUE ME DA ESPERANZA

El hombre.., creo que podría afirmar que se alimenta de esperanza. El amor está sobrevalorado, no en cuanto al hecho en sí, sino en lo que ello conlleva. Diría que si el amor es tan importante en esta vida es porque en él volcamos nuestra ilusión y nuestras esperanzas, pero cuando perdemos ambas la cosa se pone chunga. Cuando consigo correr bien como ocurrió el viernes pienso que no he llegado tarde a ningún sitio, que aún puedo hacer cosas chulas, y eso sé que es porque algo se enciende dentro de mi que me invita a seguir creyendo. Tocaba hacer un circuitín de 11,5, que es más duro en sentido contrario, pero que en esta ocasión comenzaba por el Camino de Membrilla y terminaba regresando por el Carril del Yeso. Además, decidí hacerlo con un interval agresivo: 25 zancadas alternativas suave y 50 zancadas alternativas fuerte, lo que me daba poco margen de recuperación. Aunque me costó me sentí bastante suelto y logré estar cambiando ritmos durante 35 minutos. Tras eso me puse los últimos 10 minutos a buen ritmo constante. Llegué a casa con soltura y sin molestias algo que casi tenía por olvidado.

Y encima lograba acumular 86 kilómetros en la semana, algo que no conseguía hacía mucho tiempo.


No hay comentarios :

Publicar un comentario