RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

domingo, 28 de septiembre de 2014

NUEVOS PLANES: TOCA NO ESTARSE QUIETO. ¿TRES MARATONES EN 45 DÍAS?

Ahora que ha llegado el otoño toca cambiar el chip: guardar en el armario la mochila, las botellas, la manta térmica y otro montón de complementos de trail y de montaña, porque de aquí en adelante y para los meses venideros toca asfalto. El 16 de noviembre tengo cita con la Maratón de Valencia. Quien ha tenido la oportunidad de seguir este blog seguramente sabrá que la única vez que tras una carrera he terminado en un hospital fue allí, en la edición de 2012. El punto kilométrico 39 fue testigo de un terrible colapso muscular en forma de rampas generalizadas en ambas piernas. Al final todo quedó en anécdota porque en un par de horas tras ponerme suero salía por mi propio pie y bastante bien. Tres semanas después disputaba la Maratón de Castellón y esa sí que cuajó, con 03:04, mi segunda mejor marca tras el 02:58 de Roma de 2013. Pero el recuerdo de Valencia siempre ha estado ahí: mi mujer con la cámara de fotos esperando en la meta y la desesperación de no saber dónde estaba, todo el trabajo tirado al garete, aunque luego sí que sirvió para correr bien en Castellón. El caso es que en esta segunda parte del año en la que ando arreglando antiguas averías (ya he logrado resarcirme de la Madrid Segovia del año pasado), toca reparar los recuerdos de Valencia. Soy consciente de que correrla en 4 horas es para mi un entrenamiento de los que hacía para la Madrid-Segovia y también sé que correrla en 3:30 supone bastante esfuerzo y poco premio, por lo que tengo que ir a por el tiempo que creo que puedo hacer en estos momentos, que se debería aproximar a 03:10. Si trato de ir a bajar de las 3 horas es más que probable que vuelva a petardear.

Lo bueno es que me encuentro bastante mejor que el año pasado a estas alturas, cuando tras el fiasco de la MS 2013 traté de coger ritmo corriendo la Media de Alcázar, y tras sufrir bastante hice 01:25, el 10.000 de Socuéllamos con 38´ bajos y la Media de Ciudad Real que fue un auténtico desastre con malas sensaciones y 01:29. Tras esta media corrí la Media de Benidorm yendo a por todas y fuera por mi estado físico o fuera por las zapatillas que estrenaba, las Adidas Adizero Maná, terminé contracturado en los isquios y retirado. Dos semanas después sobrevino una nueva pequeña catástrofe en la Maratón de Málaga donde de nuevo apareció la terrible contractura aunque en esa ocasión no me retiré. Al final todo acabó con microrotura y hasta enero no comencé a levantar cabeza. No estoy en la misma situación: para empezar en 2014 he sabido sufrir en la montaña, terminando las tres pruebas que he corrido (el Trail Sierra de la Mosca de 30 kilómetros, el QDC de 50 kilómetros de la Quijote Legend y la Maratón Nocturna Camins de Cabres, la cual fue tremenda de dura. Entre tanto he corrido alguna media, 01:26 en Bolaños, algún 10.000, como el de Mocejón con 38´largos, Ciudad Real, con 39´bajos, y algún 10.000 y alguna media con mi mujer pero no compitiendo. Ahora he terminado la Madrid-Segovia y me encuentro fuerte, me encuentro muy bien, pero el ritmo es para mi una incógnita porque desconozco si seré capaz de ir rápido. Por ello la semana que viene correré la Media de Alcázar y me he puesto como objetivo una marca discreta de 01:28, para que al menos me sirva de entrenamiento, y el 10.000 de Socuéllamos en el que me gustaría poder hacer 38´. Pero además tengo un par de incógnitas que despejar:
  1. Correr la Maratón de Castilla la Mancha que se disputa en Ciudad Real el 19 de octubre, en cuyo caso no correría el 10.000 de Socuéllamos. Esta maratón no la haría fuerte y sería para conseguir rodaje.
  2. La Maratón de Málaga: en la primera de diciembre. Tengo ganas de sacarme esa espina del pie porque aunque estoy orgulloso de haberla terminado a la pata arrastra el año pasado, me gustaría quedarme con un recuerdo distinto de esta prueba. Estoy sopesando si hacerla y todo dependerá de cómo me encuentre en Alcázar de San Juan el domingo. De encontrarme bien, reservaré en mis entrenos y lo más seguro es que me centre en realizar todas estas competiciones. Si no me encuentro bien o no estoy bien del todo decidiré seguir con la carga de entrenos hasta Valencia, corriendo, eso sí en Socuéllamos.

No hay comentarios :

Publicar un comentario