Posible..., posible... sí lo es. Además me encuentro bastante mejor que un mes antes de Málaga (luego me lesioné y todo se fastidió aún más pero sin embargo hasta el tirón en el 11 fui cómodo con el globo de las 3 horas). Recuerdo que hace un año tenía bastantes dudas de mi rendimiento: tocaba correr la Media Maratón de Torremolinos y no sabía cómo me iba a encontrar. Fue un día muy duro de viento y la media es sin duda la más dura que he corrido jamás; sin embargo mejoré mi marca personal con 01:23. Dos semanas después, en casa, aquí en Valdepeñas, teníamos nuestra media, y tenía la convicción de que podría bajar mi registro porque el recorrido era menos duro que el de Torremolinos y yo me encontraba aún mejor y así resultó: 01:21 y la posibilidad perdida de haber bajado de 01:20, porque la verdad es que fui reservón por el hecho de no querer forzar a un mes de la Maratón de Roma. Llegó Roma y pasó: no lo busqué pero pasó de forma natural. Con el dichoso adoquinado por medio no me planteaba seriamente bajar de las 3 horas, pero ocurrió casi sin buscarlo. Hoy sé que si ese día hubiese corrido la Maratón de Sevilla podría haber hecho 02:54-02:55 en lugar del 02:58, y quizá las ocasiones las pinten calvas y no me vuelva a encontrar tan bien como entonces nunca jamás (soy un año más viejo y me acerco a los 44 años). Sin embargo, en mis entrenos actuales encuentro sensaciones paralelas con las experimentadas por entonces: me siento muy suelto, he perdido peso y me he fibrado un poco más, y todo en prácticamente un mes y unos días desde que me regresé al plan tras la microrotura de isquios de diciembre. ¿Bajar de 3 horas en Sevilla?, lo dudo, sinceramente, pero si volviera ocurrir prometo que lloraría otra vez como un niño porque me está costando mucho mantener todo esto. También os puedo decir que sí la disfruto y no hago un gran tiempo también quedaré satisfecho.
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