RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

miércoles, 3 de abril de 2013

MIÉRCOLES 3: I´M RUNNING IN THE RAIN

Como diría la canción, eso sí, cambiando el verbo, dejando de cantar y poniéndose a correr. Así podemos resumir el entreno de hoy. Y como le pasaba a Fred Astaire en la película, yo he sido feliz corriendo mientras caían chuzos de punta; que conste que él tenía ventaja porque bailaba con paraguas. Salí a eso de las 20 horas, comenzando por un circuitín cercano a casa, por la zona norte, y para luego ir por la vía de servicio de la AIV sentido Andalucía hasta el parque. Ya desde el kilómetro tres me ha comenzado a llover; pero hoy he sido lo suficientemente previsor y he salido con guantes y chubasquero, y eso me ha permitido no pasar apenas frio. Antes de llegar al parque ha comenzado a apretar, y ya no digamos cuando he comenzado a dar vueltas en el recinto. El entreno iba ligero, a un ritmo cercano a 5´el kilómetro durante los 28 minutos que me ha supuesto alcanzar el parque y una vez en él tenía que dar siete vueltas realizando cambios de ritmo de 400 metros fuertes y 600 metros moderados, es decir, nada de ir muy suave. La lluvia se ha hecho la protagonista y los charcos se han acumulado por todas las zonas, para a mi ya no me ha importado mucho, porque me he adaptado a las condiciones y la lluvia puede ser placentera si no vas pasando frio, como ha sido el caso. He empleado algo menos de 30 minutos en realizar los 7 kilómetros, lo que está bastante bien, porque me ha salido la vuelta en aproximadamente 4´20´´ y me he ido ligerito a casa, nada de descalentar. Finalmente 1 hora y 5 minutos para una distancia de 14200 metros.

Buen entreno con muy buenas sensaciones


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