Salimos bastante tarde y tomamos el Camino del Don Bernardo para luego coger el camino oblicuo que nos lleva a las escombreras del Camino de las Casas de Santa María. Ibamos realizando largos cambios de ritmo de 5 minutos alternados con ritmo suave otros 5. Nos salieron unos muy majos 10 kilómetros, y justo al llegar a casa tenía tres llamadas perdidas. Mi padre estaba bastante mal y se lo llevaba la ambulancia a urgencias. Me duché rápidamente y fui a casa al tiempo de ver cómo la ambulancia partía rápidamente hacia el hospital, iba a ser una noche larga, iba a ser la noche más larga.
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