RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

DESDE EL LUNES 17 AL VIERNES 21 DE AGOSTO: UN PECADO CAPITAL PARA CADA DÍA


 Resultado de imagen de los siete pecados capitales


Tras la Maratón de Helsinki me he quedado liberado. Ahora ya puedo pensar algo más en mi y algo menos en los objetivos de Mercedes, porque toca ponerse las pilas y dar el arreón final de cara a la Madrid-Segovia del 19 de septiembre.

La semana posterior a la maratón no tuve descanso, salvo el domingo de vuelta a casa, claro. Aunque no es costumbre la de resumir los días de entrenos en una sola semana, el hecho de llevar tanto retraso en mi blog en lo relativo al uso que hago de éste como cuaderno de bitácoras, me ha llevado a publicar esta entrada para dejar constancia de todo lo acontecido en la semana que fue del 15 al 21 de agosto. Para aderezar un poco algo tan aburrido lo voy a caracterizar con los 7 pecados capitales que todo runner suele cometer mientras corre en alguna ocasión:

  1. LUJURIA: DÍA 15 DE AGOSTO, Sábado: fue un inmenso placer completar una maratón como la que hizo Merche y el pecado que cometimos fue el de la lujuria, entendida ésta como la no contención de los placeres terrenales. Que queréis que os diga, después de tanta preparación fue liberatorio poder notar las endorfinas recorriendo nuestro cuerpo allá en el estadio de Helsinki. Con calentamiento incluido me salen 43,4 kilómetros. El ritmo es bueno si lo veo como entreno para la Madrid-Segovia. Una sesión de unas 4 horas y media si sumo el cuarto de hora de calentamiento. Eso sí, no bebí lo suficiente y tuve cierto síntoma de deshidratación.
  2. SOBERBIA: DÍA 16 DE AGOSTO, Domingo: "todo está en su sitio, mi pubalgia me ha dado una tregua y pese al esfuerzo de la maratón, cuando he estornudado (yo en verano acostumbro bastante a realizar este acto casi involuntario) me duele muy poco. Todo el santo domingo de vuelta a casa, con dos vuelos por medio y por fin llegamos ya bien entrada la tarde. ¿quién era el guapo que se ponía las zapatillas y salía a correr?. Creo que pecamos de soberbios presumiendo de lo bien que habíamos corrido en contraposición a aquellos runners que iban andando porque ya no podían más. 
  3. ENVIDIA: DÍA 17 DE AGOSTO, lunes: todo un clásico, mi manera de hacer series a través de un interval que para que no se me haga muy tedioso decido variarlo y en lugar de medir minutos en cada cambio lo que hago es contar zancadas: 600 zancadas a ritmo moderado-alto y 200 zancadasa ritmo moderado-bajo, y así desde el minuto 10 de calentamiento, para completar los 13.100 metros del Circuito de la Vega. Sensaciones dispares, por un lado me encuentro bien, fuerte, pero por otra parte las pubalgia se me queja. Esa misma noche comienzo a realizar abdominales para fortalecer la zona y veo las estrellas y los luceros. Tras la sesión y con los dolores que me tocaba sufrir sentí mucha envidia de aquell@s que no tienen molestias y corren sin dolores. Esto creo que yo que es solo un pecadillo de nada.
  4. PEREZA: DÍA 18 DE AGOSTO, martes: decido correr en el descanso de mi trabajo, y no sé si es buena idea porque hace bastante calor. Cojo un circuito largo de unos 10,5 kilómetros y salgo estilo "duelo al Sol". Sensaciones dispares nuevamente, pero en este caso la parte negativa viene del excesivo calor. Todo lo que fue la antesala a la sesión estuvo caracterizada por unas enormes ganas de no hacer absolutamente nada. Me costó Dios y ayuda para cambiarme y salir a correr.
  5. AVARICIA: DÍA 19 DE AGOSTO, miércoles: en esta ocasión quiero hacer cuestas y salgo con Mercedes con la que comparto los 3 primeros kilómetros (ella se va desde ahí al Centro del Agua La Molineta a hacer pilates) y tras esto aprieto un poco el ritmo, paso por el circuito de los Cerros de la Aguzadera, regreso por la vía de servicio y llegado al Ángel hago tres series de alta pendiente por el camino corto, unos 1500 metros sumadas subidas y bajadas. Desde ahí a casa. Buenas sensaciones. El rato que estuve con Mercedes fuimos como en el cuento de la lechera: "echando cuentas de cara a Málaga, siendo ambiciosos y avariciosos, yo pensando que podría volver a bajar de las 3 horas y ella comenzando a creerse lo de bajar de las 4 horas. Ya se sabe que le pasó al cántaro...
  6. IRA: DÍA 20 DE AGOSTO, jueves: toca hacer una tirada exigente y larga, así que me voy a la Gasolinera Shell del kilómetro 192 de la AIV, pero lo hago por el Camino de Membrilla. Desde el comienzo procuro llevar buen ritmo, en torno a 4´40´´ y lo llevo bien. La vuelta por la vía de servicio no me pesa y completo un buen entreno, pero bastante duro. 17,5 kilómetros a la buchaca. El entreno estuvo caracterizado por una especie de ira; es de esos días en los que tengo ganas de reventarme en la sesión para borrar el sentimiento de ser muy mal corredor. Sé en el fondo que una sesión que me machaque no servirá para dejar de ser mediocre y por eso surge ese sentimiento negativo.
  7. GULA: DÍA 21 DE AGOSTO, viernes: toca ir a por los niños a Linares y lo hacemos tras el trabajo. La idea es salir a corretear allí un rato Merche y yo, pero llegamos demasiado tarde, así que toca realizar un descanso imprevisto. ¡Qué queréis que os cuente!, olía demasiado bien la cena y era cuestión de elegir entre sentarse a cenar o irnos a correr. Ganó la gula, claro está.

3 comentarios :

  1. Veo que sigues en tus treces de no parar, en fin, si te encuentras bien y sin grandes molestias, ¿Quién se resiste?.

    Saludos, Emilio Díaz.

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    1. Sí, en esa semana me salieron 93, en la siguiente 98 y en esta última espero llegar, si entreno hoy puedo aumentar los 107 que ya llevo. Pero a partir de mañana bajo el pistón porque sólo quedan dos semanas para la Madrid-Segovia y estoy bastante tocado con la pubalgia. Muy muy molesto

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  2. Veo que sigues en tus treces de no parar, en fin, si te encuentras bien y sin grandes molestias, ¿Quién se resiste?.

    Saludos, Emilio Díaz.

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