RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

jueves, 5 de junio de 2014

LA CRÓNICA DE LA TS RIÓPAR DE MERCEDES

Me froto los ojos, otra vez, de nuevo lo hago, ...una última vez..., no me lo creo, así se resume esta historia. Mercedes puso a andar su mecanismo y ahora parece ser que no lo puede parar. En Cáceres la hubiera llamado al móvil de haber llevado celular para indicarle que abortase su salida (ella comenzaba de su minitrail media hora después que yo) pero luego me sorprendí por cómo disfruto aquella carrera; durante mi QTC no sabía si preocuparme por mi, mi carrera y mi situación, o por ella y el marrón que presuponía que tenía. Fue tan dura para mi la subida al Padroncillo y tan técnica y peligrosa la bajada que por momento no podía dejar de pensar en cómo se le habría dado: ¿se habrá despeñado por aquí?, ¿se habrá hecho un esguince allá?, ¿le habrá dado un "flu" en esta cuesta?...Pero desde que el mundo es mundo las mujeres no dejan de sorprendernos.

Vamos a la carrera.

Estaba sobreexcitada y muy ilusionada con este evento, quizá con menos miedo que en Cáceres porque se hacía sabedora de tener ya al menos una experiencia similar. 

Según me pudo contar, los primeros 6 kilómetros y medio le resultaron duros, con constantes subidas, pero los disfruto en tanto en cuanto se fue reservando, tal y como yo la había aconsejado. Fue dejando le pasara algún que otro corredor/a y fue guardándose ante el tremendo obstáculo que le esperaba en el Padroncillo. En el avituallamiento no tomo mucho, ya que se veía con fuerzas, y padeció lo esperado en las tremendas cuestas, que doy fe que no daban ni para andar. Disfrutó como una enana en todo lo alto, en donde sólo viven las cabras y lo mejor le vino 


En esta foto se le ve justo después del mencionado avituallamiento y justo antes de comenzar la ascensión. Según me cuenta 

La bajada técnica la hizo lenta pero segura, no como su marido, y no se cayó ni una sola vez. Y dejó lo mejor para el final, como si fuese un estupendo postre, la bajada menos técnica, donde asegura que las piernas se le iban y corrió todo lo que pudo adelantando a un montón de gente y haciendo las cosas con inteligencia, es decir, quedándose con ganas de más.

Aquí la tenéis en la llegada, con un magnifico tiempo de 02:48, sexta de su categoría y tan sólo a minuto y medio de haber sido tercera, porque entraron tres corredoras un poco antes que ella.




Como no podía ser de otra forma posó muy contenta con su medalla


Y parece ser que ya no se siente cómoda llegando de las últimas, porque finalizó en el puesto 95 de 123 corredores, pero la 12 de un total de 24 mujeres, y tiene 41 años. ¡Esto no acaba más que empezar!


2 comentarios :

  1. ¡Muy bien por Mercedes!, cada carrera mejora, aumentando su ilusión; si ha superado la subida y la bajada del Padroncillo, no le queda mucho para participar en la QTC; dale mi mas afectiva ENHORABUENA.

    Saludos, Emilio Díaz.

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