El lunes por la noche me indispuse, con dolor de garganta y lo peor es que me desvelé y no dormí nada más que 4 horas, por lo que a las 4 de la mañana subí al despacho a trabajar y de ahí enlacé con mi trabajo en Manzanares. Tenía pensado hacer doble sesión de entreno, entre la del descanso en Manzanares y la segunda sesión por la noche en Valdepeñas. Cuando tuve que salir a correr al mediodía lo hice encontrándome mal y para colmo hacía mucho viento y frío, así que el entreno no fue muy placentero que digamos. Aún así logré realizar una hora y unos 10.500 metros. Pero por la tarde comencé a sentirme peor y ya en casa no estaba el tema como para ir al parque a realizar series de 300, así que me acosté tras cenar, que fue lo mejor que pude hacer, porque esta mañana me he levantado mucho mejor y dispuesto a "comerme nuevamente el día".
Bueno Javier, cuando no se puede, lo mejor es reservarse y dar una oprtunidad a la recuperación, espero que estes mejor.
ResponderEliminarSaludos, Emilio.
Sí, es cierto. Afortunadamente hoy me encontraba mucho mejor y me ha salido un entreno estupendo
EliminarNo tengas prisas. Cuando el organismo está incubando algo lo mejor es darse un descanso y beber mucho líquido. Yo he estado desde el domingo con un resfriado, fiebre alta incluida, y no me han quedado ganas de nada. Quizás mañana intente correr un poco. Lo dicho, a cuidarse.
ResponderEliminarLlevas toda la razón pero es que siento que estoy en la senda; además, cuando cojo el ritmo de entrenos es cuando comienzo a sentirme mejor. El último día que descansé fue el jueves 2, es decir que llevo 13 sesiones seguidas y de eta forma es como he comenzado a encontrarme mejor. Eso sí, algunos entrenos son muy suavitos. Por todo esto es por lo que no descansé (me quedan 39 días nada más para Sevilla)
Eliminar