RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

domingo, 21 de julio de 2013

DOMINGO 21: ESTOY EN LA ONDA



Me encuentro muy satisfecho. Tras el exigente día de ayer, con 500 kilómetros de viaje, habiendo dormido no más de dos horas, hacer 36 kilómetros de entreno y acostarme tan tarde, sirvió para corroborar lo que ya intuía, que gozó de un buen estado de forma. Hoy me he levantado a las 8, durmiendo lo normal y he estado todo el día trabajando en mi buhardilla, donde tengo mi pequeño despacho. Me he sentido con ganas de correr y tras reponer fuerzas con una paella que me ha salido muy buena (según los míos), he seguido trabajando, preparando clases, pero a las 19:30 Mercedes y yo nos hemos ido a hacer una tiradilla, que pese al calor ha resultado muy satisfactoria, porque ella se ha sentido bien durante la hora y cinco minutos que hemos tardado para hacer unos 10 kilómetros, y yo me he sorprendido gratamente por lo suelto que he rodado. Habría estado dispuesto a hacer una media maratón a tope a tenor de las sensaciones. Por ello creo que estoy en la onda, en la frecuencia que me conecta con mis objetivos.

2 comentarios :

  1. Javier, me alegro de tu estado de forma; recuerdo que alguien me dijo, "que el trabajo bien hecho, siempre obtiene recomensa".

    Saludos, Emilio.

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    1. Gracias Emilio, creo que he cometido errores, como es lógico, pero la constancia debería tener su valor. Hoy he hecho el circuito de cuestas de la semana pasada y las sensaciones han sido muy buenas, y corriendo por la tarde. Hasta el miércoles no vuelvo a dar clase y no he tenido que madrugar tanto

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