El sábado fue sabático en toda regla, apenas hice nada, más que ver la tele, consultar internet y entre otras tareas sedentarias, a eso de las 12:30 salí a trotar a un ritmo muy muy cansino. Fueron unos 5 kilómetros que se me hicieron eternos por lo aburrido, pero sirvieron para mover un poco las piernas y tenerlas activadas para la cita de la media
Sensaciones: no sé si merece la pena medirlas, pero me sentía pesado, creo que por el propio ritmo.
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