RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

viernes, 2 de septiembre de 2011

MÁS CUESTAS PARA NO PERDER LA COSTUMBRE

Esta mañana de nuevo madrugón, trotando al Angel, y allí subida por la carretera para luego bajar y volver a subir, esta vez a un ritmo mucho más alegre. Una vez arriba bajé campo através y de vuelta a casa. Muy buenas sensaciones

Tiempo total: 50 minutos

No hay comentarios :

Publicar un comentario