Otro lunes, y ante mi el mismo entreno que en la semana anterior. Salí a correr sin el foquillo y cuando me di cuenta tuve que volver a por él. Estrenaba las NB 890, el segundo par que tengo de este modelo, y la verdad es que me fue muy bien (nada que ver con la experiencia de la otra vez ya que me costó un montón cogerle el gusto a estas zapatillas). Iba bien amortiguado, fresquito y con las piernas sueltas, así que el entreno se hizo plácido. Subí el Angel y luego, tras bajar, de nuevo rodeé por el camino de los cerros de alrdedor para volver a casa. Me salieron 12,5 kilómetros en 1 hora y 2 minutos y realmente se me hizo corto. Con todo ello acabé lleno de optimismo de cara al reto que tengo por delante. Ojala todos los entrenos fueran igual.
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