Me leventé igual que una boa, hinchado de tanto beber y comer durante el día anterior. Además con ciertas molestias digestivas. Tengo claro que cuándo me pasa esto lo que he de hacer es ponerme a correr, así que me fui al parque y me puse a dar vueltas suavitas, a 6 minutos el kilómetro. Al rato se sumó Paqui Crespo una gran corredora, y estuvimos charlando de esto del running y del atletismo de competición. Finalmente, entre pitos y flautas, hice 58 minutos, lo que al ritmo que llevaba equivalen a 10 kilómetros.
RELATOS
Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.
domingo, 8 de julio de 2012
DOMINGO 8: ENTRENO NO PREVISTO
Publicado por
JAVIER AYUSO
en
17:40
Enviar por correo electrónico
Escribe un blog
Compartir en X
Compartir con Facebook
Compartir en Pinterest
Etiquetas:
ENTRENAMIENTOS
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario