El lunes trataba de recuperar la normalidad tras haberla perdido con el problema del talón tras la V CUMBRES HURDANAS. Me hallaba bastante agarrotado de la Media Maratón de Utrera pese haber ido al ritmo de mi mujer, y traté de comprobar hasta donde tenía verdadero agarrotamiento, cometiendo un craso error nuevamente: calzándome las Mizuno Wave Precision, esas viejas zapatillas que tengo como comodín, y es qu elas NB Fresh Foam Zante que me había calzado para la media no me acaban de convencer; al final voy a tener que admitir que no son para mi. Me fui a hacer el circuito que pasa por detrás del aerodromo haciendo un pequeño rodeo para que me salieran 10 kilómetros, y no salió nada bien el entreno, porque sentía molestias en ambos isquios, y se me fue acentuando conforme fui avanzando en la sesión. Llegué bastante tocadito, sin buenas sensaciones, llegando a la conclusión de que con este calzado las cosas no marchan bien, más allá de que no me halle en lo mejor de mi estado de forma, pero es que así es imposible alcanzarla.
Traté de estirar todo lo que pude para que la zona se fuese descontrayendo un poco.
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