Salir por salir, esa fue la sensación que me dio el sábado. Merche obligado un poco por lo inminente de su reto, y yo un poco llevado por el miniobjetivo de no perder un mínimo de forma y ayudarla en su intento de bajar su marca en maratón. Así que salimos diciéndole de antemano que está de tapering y que no había que forzar, ir suavito. Se lo tomó al pie de la letra, sobre todo porque no se encontraba ni motivada, ni con fuerzas, y para colmo su pie, o su fascitis, nos dio la sorpresa del día. Eso sí, lo mejor del entreno fue el circuito que nos agenciamos. Salimos a la circunvalación tras haber pasado por el Paseo del Cementerio, y cogimos el Camino Rural de la Peñuela, ese que si no te pierdes te puede llevar al malogrado Pantano de la Cabezuela (digo lo de malogrado por lo de la sequía). Las cuestas de este camino hacen que mi mujer reniegue en varias ocasiones, no se lo está pasando bien, pero tras mis reprimendas parece que se resigna y continúa a regañadientes. Pasamos por la planta o lo que sea que allí ahí, a dos kilómetros de iniciar dicho camino y giramos a la derecha justo por el recorrido que hicimos en las 2 leguas y media de este verano, para coger un camino con una cuesta tremenda que conocíamos de dicha carrera. La cuesta la hace dignamente y en la bajada tratamos de coger un poco de ritmo, algo que no conseguimos. Pasamos por el cruce de caminos donde en las 2 leguas y media habían puesto el avituallamiento, pero seguimos de frente, porque he visto en la wiki que yendo por ahí nos topamos con el camino por el que en este verano y otoño he regresado en más de una ocasión de mis tiradas largas. Merche comienza a quejarse de pinchazos en su pie y el avance se hace cada vez más tortuoso, tanto es así que hay dos o tres kilómetros en los que temo tener que regresar andando. La gran cuesta que hay a la vuelta no ayuda a sus molestias y menos la bajada posterior. El caso es que en la última subida antes de llegar a la circunvalación ella ya no se queja y podemos realizar los últimos 4 kilómetros dignamente. Incluso da para coger un poco de ritmo en los últimos 2. Lo bueno es que nos salen 18,5 kilómetros, y lo de menos ha sido el ritmo. Hay que recuperar esa molestia que se puede hacer lesión.
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