Ayer miércoles tocó descansar, que no sólo vino bien al cuerpo, sino que también y sobre todo ayudó a mi mente a despejarse y a reflexionar en relación al camino recorrido y a lo más importante: lo que está por hacer. Está siendo tiempo de inseguridades, dudas y miedos, pero, ¿qué tengo que perder?
No hay comentarios:
Publicar un comentario