Qué bien sienta salir a correr a eso de las 11 horas pm. Es entre esas horas y las cinco de la tarde, cuando en esta época del año se hace más agradable salir a correr, porque el sol, si se deja ver, calienta un poquitín y hace más llevadera la carga. En cualquier caso, había niebla e incluso frío, y sin embargo me fui en pantalón corto, dándome cuenta enseguida que era un error, porque llevé todo el recorrido los músculos algo entumecidos. Era un recorrido de 14 kms y 250 metros desarrollado por el paraje del Peral, volviendo por Las Aguas y regresando al camino de El Peral y todo el trayecto fui cómodo y suelto, algo por debajo de los 5 minutos el kilómetro (concretamente a 4:45).
Ritmo llevadero pero no exportable, al menos aún, a una maratón completa. De haberlo conseguido estaríamos hablando de 3 horas y 20 minutos, marca a la que no puedo aspirar en la actualidad, y en la que probablemente aspiraré en junio.
En cualquier caso, creo que estamos en la buena senda.
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